
La Asociación de Empresas del Gran Consumo, AECOC, se ha unido a la protesta de los profesionales de la carretera ante la prohibición por parte del servicio de tráfico de Cataluña de que los camiones circulen por la AP-7 durante los fines de semana.
Según ha comunicado la patronal de los cargadores, la medida está “poco calibrada” y resulta “de gran impacto, tanto para el sector del transporte como para todas las empresas usuarias del transporte de mercancías por carretera y del conjunto de la sociedad”.
AECOC ha señalado en una nota pública que “la restricción a la circulación de camiones los domingos supone un gran perjuicio para todos los sectores económicos, ya que por esta vía circulan 13.000 vehículos de transporte de mercancías los fines de semana”, afectando “especialmente al suministro de productos básicos, ya que los domingos son días esenciales para el reparto y reposición de las ventas del fin de semana”.
En el mismo sentido en el que lo han señalado las asociaciones de transportistas, se recuerda que “los problemas de congestión de la AP-7 no son ocasionados por el transporte de mercancías que, no obstante, resulta el principal perjudicado. Por tanto, esta medida contribuirá muy poco a la hora de eliminar la congestión del tráfico”. Por esta razón, AECOC denuncia que “se trata además de una medida injustificada y que compromete el transporte de mercancías y la competitividad empresarial, ya que el 60 por ciento de las exportaciones españolas por carretera pasan por la AP-7”.
Por último, el comunicado de esta asociación de cargadores “solicita al Servei Català de Trànsit reconsiderar la decisión tomada y no repercutir el impacto del levantamiento de los peajes sobre las empresas y los transportistas perjudicando a un sector clave para nuestra economía y sociedad”.