Una nueva fisura en la operativa del gigante del ecommerce ha quedado al descubierto. Lo hace tras las últimas investigaciones que apuntan que, en los últimos cinco años, un solo cliente ha sido capaz de sacar provecho de las vulnerabilidades de la logística inversa de Amazon, estafando a la compañía alrededor de 250.000 euros.
Durante este periodo, el cliente, que ahora enfrenta hasta 20 años de cárcel, compró artículos de gama alta, incluido un iMac Pro, para posteriormente proceder a la devolución de los mismos, enviando en su lugar productos más baratos.
El suceso, que tuvo lugar en Carolina del Norte, Estados Unidos, llevó a los fiscales a presentar cargos contra Hudson Hamrick, que se declaró culpable de utilizar de manera fraudulenta la logística inversa de Amazon hasta en 300 ocasiones.
Un patrón simple con un alto impacto
En el documento de acusación, donde se detallaban las transacciones como parte del acuerdo de culpabilidad de Hamrick, quedó reflejado que, de unas 270 devoluciones, 250 eran de “materiales diferentes en valor”, haciendo que el delito suponga el fraude de hasta 290.000 dólares, el equivalente a 248.000 euros.
Muchas de las transacciones siguieron un patrón simple: tras recibir su pedido, el cliente iniciaba la devolución y luego enviaba un artículo similar, aunque menos valioso. A veces, también vendía el producto que recibía en origen, lo que le reportaba beneficios tanto por la devolución como por la reventa.
Por ejemplo, en agosto de 2019, Hamrick ordenó un Apple iMac Pro por 4.256,85 dólares para, dos semanas después, solicitar una devolución que acabó con el reembolso por parte de Amazon.
«En lugar de devolver el iMac Pro de gama alta, Hamrick devolvió un modelo no Pro mucho más antiguo y menos valioso con un número de serie completamente diferente», dice un documento judicial presentado por Maria K. Vento, fiscal federal adjunta.
Una semana antes de que Hamrick iniciara su regreso a Amazon, vendió un iMac Pro en eBay, dijo Vento.
“No hay lugar para el fraude”
Precisamente el gigante tecnológico fue, en primera persona, el encargado de destapar el fraude, solicitando la ayuda de las autoridades ante la sospechosa actividad de Hamrick. Para acabar con este patrón, Amazon trabajó mano a mano con el FBI y la oficina del fiscal de Estados Unidos en Carolina del Norte.
“Amazon tiene sistemas para detectar comportamientos sospechos y equipos para investigar y detener la actividad prohibida”, declaró un portavoz de la compañía al portal Insider. “No hay lugar para el fraude en Amazon, continuaremos aplicando todas las medidas para responsabilizar a los malos actores”.