“En el ámbito del e-commerce, se vierten muchas fake news sobre el impacto medioambiental del comercio electrónico y, por extensión, sobre la logística y el transporte de última milla. Sin embargo, hoy hemos sabido que las compras on-line reducen más de la mitad de las emisiones de CO2 porque, entre otras cuestiones, recortan hasta nueve veces el tráfico en las grandes ciudades”, ha afirmado Francisco Aranda, presidente de UNO, en base al informe sobre el ‘Impacto del e-commerce en Europa’ de Oliver Wyman.
Aranda ha realizado estas declaraciones durante la jornada celebrada en la sede de Auren, en Madrid, bajo el título ‘Cambios en el paradigma del Gran Consumo: retos de la logística y el transporte en la era post-COVID’, en la que se han tumbado los falsos mitos sobre el impacto medioambiental del comercio electrónico en las grandes ciudades así como los retos a los que se enfrentan los sectores logístico y del retail tras el incremento de las ventas en el canal on-line y la incorporación de las nuevas generaciones a la cadena de valor.
El presidente de la logística ha destacado que la política económica y fiscal de Madrid son “un modelo a seguir para atraer la inversión empresarial” y ha pedido que se diseñe un “calendario realista” para la renovación de flotas.
La jornada ha sido inaugurada por el presidente de UNO Logística, Francisco Aranda, que ha destacado que el imparable crecimiento de las ventas a través del canal on-line, no implica “en absoluto” que la parte tangible del sector retail desaparezca del paisaje urbano. “No podemos concebir el futuro del gran consumo sin la tienda física. Es más, en el nuevo modelo las ventas del canal on-line están siendo el trampolín del crecimiento del comercio a pie de calle”, ha asegurado.
A pesar de ello, a la hora de diseñar planes y medidas que afecten a la sostenibilidad medioambiental de la logística y la movilidad urbana, es imprescindible tener presente que las entregas de última milla en las grandes ciudades se incrementarán entre un 30 por ciento y un 40 por ciento de aquí a 2030. Por tanto, “para mantener la senda de reducción de emisiones, los gobiernos deben adoptar medidas que pivoten sobre un calendario realista.
«A día de hoy, con unos niveles de inflación que superarán el 6 por ciento a final de año, es inviable para muchas empresas acometer la inversión que requiere renovar las flotas”, ha puntualizado Aranda. En este sentido, el presidente de UNO Logística ha solicitado que se activen cuanto antes paquetes de ayudas que contribuyan a impulsar la transición a la movilidad inteligente. En este punto ha puesto como ejemplo la renovación hace apenas una semana del Plan Cambia 360 del Ayuntamiento de Madrid, que incorpora ayudas de entre 600 y 12.000 euros para la renovación de vehículos urbanos de distribución de mercancías. También se ha referido a la reciente aprobación de la línea de ayudas de la Comunidad de Madrid para la renovación de las flotas cuya dotación asciende a 16 millones de euros.
A este respecto, el dirigente empresarial ha querido señalar la importancia de diseñar políticas económicas que atraigan la inversión y conviertan a Madrid y a España en un “hub logístico mundial de primer nivel”. “La política económica debe mirarse en el espejo de Madrid, que ha diseñado medidas que requieren un menor esfuerzo fiscal de las empresas y ha apostado por iniciativas que facilitan la libre circulación de empresas y suprimen barreras burocráticas y administrativas. No podemos continuar perdiendo competitividad por culpa del yugo de la presión fiscal y de la maraña administrativa a la que están sometidas nuestro sector empresarial”. De lo contrario, aseguró Aranda, “corremos el riesgo de perder inversiones en un sector estratégico y tractor que cada vez gana más peso en la competitividad de nuestra economía”.
Problemas de la carga y descarga
Durante el acto de inauguración ha intervenido el alcalde de Madrid, José Luis Martínez – Almeida, quien ha explicado ha explicado que, respecto a “los problemas del día a día con la carga y descarga” se está trabajando en la implementación de un sistema de reserva previa y se está estudiando la posibilidad de desarrollar la “distribución de una milla” a través de centros de distribución logística en Madrid. Asimismo, ha recordado la existencia de una línea de subvenciones y ayudas para la renovación de la flota con la finalidad de mejorar la calidad ambiental de la ciudad.
También ha puesto en valor la importancia de adoptar medidas que permitan una transición ordenada hacia la movilidad sostenible que sea compatible con el crecimiento económico. “Si la sostenibilidad no es compatible con la economía se producirá un retroceso. La transición nunca puede ser socialmente injusta y no puede recaer en aquellos que tienen la responsabilidad de llevarla adelante”. A este respecto Martínez – Almeida ha recordado que “es la sociedad quien genera riqueza, no las instituciones”. Por ello, hay que favorecer un “marco fiscal competitivo y eliminar barreras al crecimiento económico y la creación de empleo”.
Asimismo, se ha referido al cambio que deben acometer las ciudades para adaptarse a los nuevos hábitos de consumo en los que la logística tiene un protagonismo indiscutible. “La logística es esencial para el futuro de las ciudades y la ciudad de Madrid va a ser un caso de éxito en lo que a logística urbana se refiere”, ha asegurado. En este punto, el alcalde de Madrid ha avanzado que el Ayuntamiento está trabajando en un plan de flexibilización de usos urbanísticos que facilite el trabajo de todos los integrantes de la cadena de valor del sector logístico, desde los operadores hasta la última milla.
Almeida ha subrayado, además, la importancia de las instituciones en el acompañamiento a la sociedad, “que es la verdadera generadora de riqueza” y, en este sentido, ha recordado el denominado ‘Modelo Madrid’ basado en un marco fiscal competitivo, un marco normativo que garantice seguridad jurídica y la eliminación de barreras burocráticas para facilitar el establecimiento de actividades económicas en la ciudad. /
¿Dónde van los Fondos Europeos?
“A pesar de la inflación, seguimos esperando que el Gobierno haga algo para bajar los impuestos y la inflación”, señaló Aranda. Y es que, según los cálculos de la patronal logística y de transporte, la inflación está incrementando los costes de las empresas entre el 1,5 por ciento y el 3 por ciento de media. A lo anterior hay que sumar el impacto de la subida de tipos de interés que han de asumir las compañías y negocios que hayan suscrito algún préstamo para financiar sus inversiones. Aumento que estaría poniendo en juego la viabilidad de muchos de ellos, entre otros motivos porque entre el 30 por ciento y el 40 por ciento no lo estarían repercutiendo en los precios finales. Todo en un momento en el que, en el caso del sector logístico, la demanda de paquetería se habría contraído en torno a un 20 por ciento.
Es bajo este contexto donde los Fondos Europeos juegan un papel decisivo pero “siempre y cuando se destinen a proyectos tractores que mejoren la productividad de las empresas, contribuyan a su internacionalización y generen así empleo y riqueza”. En este punto, Aranda criticó con dureza la falta de agilidad y de transparencia en la concesión de las ayudas “carece de sentido que las empresas que optan a los Fondos Europeos tengan que esperar más de ocho meses para acceder a las ayudas europeas. Como tampoco tiene lógica alguna que no sepamos cuánto dinero ni qué tipo de empresas y proyectos se están financiando”.