Ferrero Ibérica, filial del Grupo en España y Portugal, ha cerrado sus cuentas anuales, que contabilizan desde septiembre de 2019 hasta agosto de 2020, con una facturación de 260 millones de euros, lo que representa un 2% más respecto a los 255 millones del mismo periodo del año anterior, y una facturación neta en España de 198 millones de euros. La compañía tiene una cuota de mercado del 15,4% en España, y se posiciona como una de las mayores empresas del sector del chocolate del país. Ferrero ostenta el liderazgo en la categoría de bombones, con marcas como Ferrero Rocher, Mon Chéri y Raffaello entre otras, con una cuota de mercado del 27,8%. En snacks de chocolate, Ferrero cuenta una cuota del 32,9% gracias a marcas como Kinder Bueno. Respecto a novelties, con Kinder Sorpresa y Kinder Joy como principales productos, la compañía cuenta actualmente con una cuota del 48,9%. Ferrero destaca también por su presencia en el mercado de cremas de untar con su marca Nutella y de caramelos, a través de Tic Tac. Ferrero cuenta en España y Portugal con una plantilla de 180 trabajadores. Por su parte, Grupo Ferrero, liderado por Giovanni Ferrero, cerró su ejercicio financiero con una facturación consolidada de 12.300 millones de euros, lo que representa un aumento del 7,8% respecto a la facturación del año anterior, de 11.400 millones de euros. Ferrero cuenta actualmente con 105 empresas y 31 plantas de producción en todo el mundo, y tiene presencia en 170 países. El grupo cuenta con 37.122 empleados. Como parte de la estrategia de desarrollo del Grupo, Ferrero ha ampliado en este periodo su capacidad de producción, con inversiones que ascienden a 619 millones de euros, principalmente para sus plantas en Italia, Alemania, EEUU y Polonia. Estas inversiones tienen como objetivo principal mejorar la calidad y frescura de sus productos, la seguridad alimentaria, la competitividad y, por último, reducir el impacto ambiental de su actividad.