La meta de entregar 2.000 millones de dosis a países en desarrollo tendrá que esperar. Las autoridades del programa global COVAX, respaldado por la OMS, han anticipado que, debido a problemas con la logística y complicaciones en la fabricación, prevén alcanzar el 70 por ciento del objetivo inicial.
Las organizaciones que patrocinan el mecanismo han reajustado sus previsiones dado a una serie de factores, entre los que se incluyen las restricciones a la exportación impuesta al Instituto de Suero de India, uno de los principales proveedores.
«Esto es, por supuesto, malo para todo el mundo, ya que hemos visto las terribles consecuencias que se producen cuando se deja que el virus se desplace sin control», explicó el director ejecutivo de la Alianza para las Vacunas GAVI, Seth Berkeley.
El riesgo de más retrasos
Berkeley ha añadido que no pueden permitirse más retrasos mientras los agentes sanitarios en los países con menos recursos siguen necesitando protección.
En la declaración conjunta del programa mundial, se afirmó que el hito de los 2.000 millones de dosis entregadas por COVAX se prevé ahora para el primer trimestre de 2022.
Retrasar las terceras dosis
En línea con las necesidades expuestas por la OMS, el organismo internacional ha insistido a los países con más recursos que se abstengan a ofrecer las vacunas de refuerzo hasta fin de año, poniendo a disposición esas dosis para los países más necesitados.
Ese fue el mensaje del director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus en una conferencia de prensa este miércoles, redoblando un llamamiento anterior a una “moratoria” de las dosis adicionales, que ha sido mayormente ignorado.